Jeremy Scott acaba de hacer pública su auténtica vocación: la de grafitero o artista de Street Art. Ha sido ponerle un spray entre las manos y que se volviera literalmente loco. Os explico: Esta tarde y coincidiendo con la Menswear Fashion Week, a las 17,00 h (hora torera) tuvo lugar en Mayfair (Londres) el desfile de Moschino para el otoño-invierno 2016-2017.
Un show en el que desfilaron tanto modelos masculinos como femeninos con pantalones y chaquetas que parecían haber sido arrugados antes de ser rociados con pintura en spray plateada, como para que luego al estirarse creasen volúmenes y sombras. Una técnica que me ha recordado un poco a la del batik sólo que sin cera.
Pero no contento con eso, aprovechó la pintura que se había esparcido por el suelo para impregnar con ella la suela de goma de sus botazas de cordones, y luego pasearse por encima de bombers y pantalones dejando marcadas sus huellas multicolores. Y como el efecto debió de gustarle, se dedicó también a pintar flores y cruces redireccionadas de forma arbitraria creando un curioso estampado.
También me llamaron mucho la atención esos pantalones pitillo con sobrefalda de tablas confeccionados en tela de tartán accesorizados con las famosas botazas de cordones que os comentaba antes. Era como si la tendencia aquella que consistía en anudarse a la cintura camisas de cuadros como si fuesen jerséis hubiese evolucionando proporcionándonos estas especies de colas que, mal comparadas, recordaban un poco a la de los fracs.
Mención aparte merecen las camisetas y trajes mini de algodón con el estampado en primer plano del retrato realizado con plantilla de algún líder - ¿político, religioso, un músico? Lo siento, pero no he sido capaz de reconocerlo, puede que incluso fuese la reproducción del torso del David de Miguel Ángel, y aquella otra que al unir dos interrogantes creaba una especie de intersección que recordaba ¿un útero femenino?
Curiosa también la reinterpretación de las gafas Eskimo creadas por Courrèges en 1965 sólo que en vez de ranura en esta ocasión se trataba de un garabato, y los jerséis extralargos de cuello vuelto a rayas que recordaban a los dibujos de la abeja Maya, sólo que habían sido tiznados con grasa del tipo con la que nos manchamos sin querer cuando visitamos un garaje.
Al final del desfile, Jeremy Scott salió a saludar acompañado por Jourdan Dunn. Ambos se habían puesto muy elegantes para la ocasión luciendo él un chaqué adornado con cruces y Jourdan una LBD a juego, aunque ella se había puesto perdidita de pintura hasta las pestañas, y ésta le goteaba por el pelo y también por las orejas.
Un desfile que no quiso perder Machine Gun Kelly, que ya sabemos que es muy de la cuerda de Scott.
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Sitio oficial | Moschino
En Trendencias Hombre | Jeremy Scott y Moschino nos invitan a combinar y jugar con los contrastes entre épocas